
Una voz. Una voz que le resulta familiar. Una voz de alguien a quien, desgraciadamente, no ve desde hace mucho.
- Secretos...Secretos de Medusa...
De repente, luz. Abre los ojos y está ahí. Esa profesora a la que no veía desde hace mucho tiempo, desde que dejó de estudiar.
- ¿Secretos de Medusa?- pregunta con la voz quebrada.
- Sí.
- ¿Qué es eso?
- ¿Ya no te acuerdas?¿Tanto tiempo llamándonos así y no lo recuerdas?-pregunta enfadada.
- No...-responde intentando pedir perdón con esa palabra, por no acordarse.
- ¡Nuestra clase!¡Todo!
- Ah...Ya sé...- su voz no es muy segura- Pero...¿a qué viene eso ahora?
- ¿Ya sabes por qué puse ese nombre?- pregunta curiosa.
- No, no nos lo dijiste, y nadie fue capaz de saberlo- esa pregunta le molestó un poco, ella sabía perfectamente que nadie lo había adivinado.
- Vaya...os creía más inteligentes y espabilados.
- Pues ya ves...¿por qué lo pusiste?
- Eso lo tienes que averiguar tú. Acompáñame.
- Secretos...Secretos de Medusa...
De repente, luz. Abre los ojos y está ahí. Esa profesora a la que no veía desde hace mucho tiempo, desde que dejó de estudiar.
- ¿Secretos de Medusa?- pregunta con la voz quebrada.
- Sí.
- ¿Qué es eso?
- ¿Ya no te acuerdas?¿Tanto tiempo llamándonos así y no lo recuerdas?-pregunta enfadada.
- No...-responde intentando pedir perdón con esa palabra, por no acordarse.
- ¡Nuestra clase!¡Todo!
- Ah...Ya sé...- su voz no es muy segura- Pero...¿a qué viene eso ahora?
- ¿Ya sabes por qué puse ese nombre?- pregunta curiosa.
- No, no nos lo dijiste, y nadie fue capaz de saberlo- esa pregunta le molestó un poco, ella sabía perfectamente que nadie lo había adivinado.
- Vaya...os creía más inteligentes y espabilados.
- Pues ya ves...¿por qué lo pusiste?
- Eso lo tienes que averiguar tú. Acompáñame.
Se dirigieron a un sitio extraño, pero extraordinario, maravilloso. Era una especie de sala negra, con las fotografías de todos sus compañeros de clase, y delante tenían algo, que sólo lo podías ver si te fijabas bien.
- ¿Qué es?
- Son medusas.
- Pero... ¡Son casi transparentes!
- Exacto. Son como un espejo, detrás de él hay un secreto.
- ¿Y por qué están ahí nuestras...?¡Claro! Nosotros somos ese secreto, lo que hay en nosotros es ese secreto...Cada unos de nosotros es diferente, cada uno destaca en algo, ¡los secretos de medusa somos nosotros!
- Sí. Ahora que lo sabes, debes irte.
- Pero...
Luz de nuevo. Ojos cerrados que vuelven a abrirse. Está en su habitación.Todo fue un sueño. Manda un sms contándoselo a sus compañeros, esperando respuesta. Suena el teléfono. Un mensaje que dice: “Yo también lo soñé”.
- ¿Qué es?
- Son medusas.
- Pero... ¡Son casi transparentes!
- Exacto. Son como un espejo, detrás de él hay un secreto.
- ¿Y por qué están ahí nuestras...?¡Claro! Nosotros somos ese secreto, lo que hay en nosotros es ese secreto...Cada unos de nosotros es diferente, cada uno destaca en algo, ¡los secretos de medusa somos nosotros!
- Sí. Ahora que lo sabes, debes irte.
- Pero...
Luz de nuevo. Ojos cerrados que vuelven a abrirse. Está en su habitación.Todo fue un sueño. Manda un sms contándoselo a sus compañeros, esperando respuesta. Suena el teléfono. Un mensaje que dice: “Yo también lo soñé”.
FIN
Adriana Taboada González Nº 26 4ºESO C
2 comentarios:
Muy bonito
Manuel Cardenal
Está muy bonito pero hay demasiado enfado. TAnia
Publicar un comentario